Todo tipo de enfermedad es tratada por medicamentos farmacológicos, o en su defecto, tratamientos naturales, todo depende de las indicaciones médicas.
En este orden ideas, te debes imaginar que hablaremos de medicamentos para tratar enfermedades o infecciones, y sí, estás totalmente en lo cierto, pero no de fármacos como tal, sino de uno en específico, el Itraconazol.
Primero que nada, te explicaremos y diremos qué es el Itraconazol y cómo está compuesto. Salvo que entiendas la terminología médica y científica plasmada acá, lo entenderás, sino te induciremos en ella. El Itraconazol, también conocido como Oriconazol, es un derivado imidazólico de última generación usado en medicina por sus propiedades antifúngicas.
El Itraconazol suele comportarse como una especie de base débil, y bueno, químicamente es un derivado triazólico al igual que sus hermanos, el Fluconazol y el Voriconazol. Su fórmula, es la siguiente: C35H38Cl2N8O4. Así que si eres amante de la química en general, entenderás de qué está compuesto. Dejando a un lado este tema, centrémonos en lo de interés.
De esta manera, ya tenemos entre ceja y ceja lo que es y cómo está compuesto el Itraconazol. Y sí, este medicamento es utilizado y tomado muy en cuenta por los médicos al momento de recetar tratamientos para combatir la Candidiasis por hongos de la Candida albicans, en áreas como la vagina, la piel, la boca, las uñas y algunos órganos internos.
El Itraconazol, es un antimicótico de origen farmacológico normalmente presentado en tabletas o cápsulas de diferentes miligramos. Si padeces de alguno de los tipos o clases de Candidiasis previamente descritos, es mejor que consultes a tu médico de confianza al momento de darle inicio a un tratamiento farmacológico con Itraconazol.
Esto te lo decimos con la intención de hacerte saber que la automedicación puede ser realmente peligrosa, puesto que si te encuentras tomando otros medicamentos por alguna otra infección o enfermedad, puedes presentar un cuadro alérgico a los compuestos que conforman el Itraconazol. Ya sabes, no te automediques y acuda al doctor para que te recete un tratamiento.
Cabe resaltar que los tratamientos con el antifúngico, Itraconazol, suele ser bastante severo para nuestro organismo, sobre todo con nuestra flora intestinal, así que las dosis recomendadas por el médico deben ser estrictamente las mismas. De cumplirlas, verás cómo tu flora intestinal se restaurará de la mejor manera. Evitarás la aparición de otras infecciones.
Itraconazol candidiasis oral
Si padeces de Candidiasis oral, una de las mejores opciones será iniciar un tratamiento con Itraconazol, pero con el previo consentimiento de tu médico, quien te prescribirá la cantidad o dosis que debes utilizar. Para este tipo de Candidiasis, lo normal es seguir un tratamiento de dos semanas con la ingesta de una cápsula de 100 mg de Itraconazol una vez al día.
Itraconazol candidiasis genital
El Itraconazol es uno de los medicamentos preferidos de los médicos al momento de darle a su paciente un tratamiento efectivo para la Candidiasis vaginal o Vulvovaginitis candidiásica. En el caso de las mujeres, estas deberán consumir una o dos tabletas diarias de Itraconazol de 200 mg por un lapso de tiempo de uno a tres días. ¡No olvides consultar a tu médico!
Sí, unos prefieren los tratamientos naturales, pero sin duda alguna, los fármacos en ocasiones pueden ser nuestra mejor opción, así que tómalos en cuenta y no desistas de su uso. Por último, te invitamos a que compartas este artículo nutrido con información acerca del consumo de Itraconazol cuando se padece de Candidiasis. ¡Compártelo en tus redes sociales!
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